Siento mucha tristeza.

No es facil volver al día a día, no solo por quien era, si no porque era también mi amigo, y con el que pasaba mucho tiempo, disfrutando de cosas que me gustan. Ahora mismo no puedo hacer esas cosas, porque me traen demasiados recuerdos, y sufro. Tampoco puedo hablar demasiado porque era él con el que lo hacía.

Es mucho más difícil que nunca, duele mucho  y cuesta, ahora mismo veo un largo camino antes de lograr encerrar los sentimientos, que tengo a flor de piel. Ni mirar por la ventana sintiendo el viento me ayuda porque veo la barrera que tantas veces he pasado para verle. No puedo disfrutar de los juegos con los que jugaba, ni ver los vídeos que solíamos ver, porque no puedo comentarlos con él, porque son demasiadas sensaciones.

He abierto otro blog, para intentar escribir un diario donde pueda escribir todo lo que me sucede día a día de forma de autoterapia, de esa forma aquí evitaré muchas entradas tristes, que parece que tengo material de sobra por una temporada. Seguiré escribiendo aquí, pero no expresaré tan fielmente los sentimientos que tengo ahora mismo en mi.

A pesar de las cosas que pensé la noche de antes de ayer y de las cosas que pensé que iban a suceder, me encuentro antes situaciones diferentes, ni me siento como pensaba, ni quiero lo que quería, ahora según pasa el tiempo, pienso con un poco más de claridad que al teléfono, y veo que es posible alguna solución que hace dos días pensé que no sería capaz de realizar si en un tiempo se diera el caso.
Puede que todo esto sea por una razón y no debo de cerrar puertas que ni siquiera existe, porque nunca se está al 100% seguro de algo, porque la vida cambia con el más mínimo detalle, y puede que igual que pensé que no podría soportarlo, ahora al hablar con mi gente cercana, veo que podría realmente volver a esa situación que tenía hace solo unos días.

Es muy posible que esta situación no se presente, pero ahora mismo me veo con fuerzas de sobrellevarla si llega a surgir, mientras que hace unos días era impensable, tal y como se lo hice saber.

Está claro que siempre será una persona especial, y que guardaré de por vida muchos buenos ratos y recuerdos de él, aunque estos días los envié muy al fondo para no tenerlos a flor de piel y sufrir más de lo que ya estoy haciendo ahora mismo.

Siento tristeza hasta el último rincón de mi cuerpo,y ni me puedo imaginar sonreír ahora mismo, no sé que es la alegría estos días. Poco a poco se irá pasando todo el dolor que siento y volveré a ser ese flequillo sonriente que solía ser, hasta entonces... estaré muy de capa caida.