Realidad inesperada

Hoy me he levantado con ganas de escribir, no tengo mucho que contar ni que enseñar, pero simplemente me apetecía escribir.

Llevo tiempo alejada de la vida diaria de cualquier ciudadano, me dedico a estudiar y a pasar mi poco tiempo libre con una persona muy amada. Y debido a esto solamente me encuentro informada de lo que pasa con el mundo a través de TT  facebooks y la aplicación de últimas noticias de firefox, no es una gran forma de vivir, pero es la que toca. Cada vez me sorprendo más de la cantidad de tonterías que suceden en la vida, la gente se preocupa por idioteces, porque se a tatuado nose quién, que si se casa muy joven la chica que si bla, bla, bla.... y se dedican a criticar la situación, sin hacer nada al respeto.

Me canso de tanta hipocresia, de tanto laberinto sin salida, si la gente se decidiera a dar un paso, a actuar, A DEJARSE LLEVAR, todo sería mucho mejor, menos comeduras de tarro y mas actuaciones. No somos mejores por criticar lo que pasa en el mundo, somos peores por no hacer nada al respecto. Dejamos de ser nosotros mismos cuando nos dejamos arrastrar por la corriente de la sociedad. Tenemos que aprender a vivir, como hacíamos hace tiempo, sin preocupaciones, sin presiones,y si alguién hacía algo mal, se actuaba, no se quedaba la gente en casa diciendo mira que pobrecito soy.

Hay mucho parlachín y muy pocos guerreros. Hay demasiados mandamás y pocos luchadores. No nos dejemos llevar, arrastrar o llenar de pánico. Dejémonos llevar por el instinto, por las tácticas de lucha y las ganas de un mundo mejor.

Comencemos a mandar. Dejemos de quejarnos sin mas en la barra del bar de la esquina, en la panadería o pescadería. Salgamos a la calle, y digamosles a esos caraduras, de lo que va la vida, de lo que es vivir, de lo que es disfrutar, de lo que es dejarse llevar.

Me voy a vivir.