Erase una vez...

Entonces, entró un pequeño rayo de sol por la pequeña rendija que había dejado entre la cortina y la ventana anoche. Y ese indefensa luz, la despertó. 

Había esperado tanto la señal, quizás fuera esa, o quizás no, pero tenía que comprobarlo. Ella no creía en el destino, asique tenía que arriesgarse si quería saber que as era la señal era lo que realmente estaba esperando.

Asi pues lo hizo. Se levantó y empezó a preparse con la rutina que tanto la gustaba repetir. 

Ya casi había elegido lo que iba a ponerse para la ocasión, cuando en ese preciso instante, sonó el telefono. Simplemente era un mensaje pero había escuchado esa canción que tantos recuerdos la traía. Entonces lo supo. Era el momento, y era la señal más clara que había visto jamás.

Se fue corriendo a por el bus y se plantó en el sitio por el que sabía que iba a pasar. Y esperó. Esperó mucho tiempo a decir verdad... y entonces.... ¡zas! ahí estaba, con sus pantalones un poco caídos, su camiseta de marca y su pelo casi negro hacia arriba como a él le gustaba.

Entonces un escalofrio recorrió todo su cuerpo, se levantó del banco y [...]

...to be continued